Alfredo Di Estéfano

Esta considerado por la FIFA uno de los cinco mejores jugadores de fútbol del siglo XX. En 2004 fue elegido el cuarto Mejor Jugador del Siglo XX por la IFFHS y también por todos los ganadores del Balón de Oro hasta 1999.

Biografía

Alfredo Stéfano Di Stéfano Lahulé nació el 4 de julio de 1926 en La Boca -el barrio portuario de Buenos Aires, Argentina-, siendo el mayor de tres hermanos. Di Stéfano es como su barrio: fútbol y mestizaje. Hijo de padres italianos y con raíces francesas e irlandesas, de su educación porteña tomó la fiebre por el fútbol. Desde muy pequeño, Alfredo, con una pequeña pelota de goma aprendió los trucos del dominio del esférico, que luego trasladaría al campo de verdad.

Probablemente fue el hombre que cambió el curso del fútbol, pues tenía clase, técnica, dinámica, velocidad, poder, sentido, gol, pero también sacrificio y carácter. Fue el futbolista universal capaz de decidir en todos los sectores del campo y de alterar el equilibrio de la competición. Todo ello hizo que en 1989 fuese elegido por la prestigiosa revista "France Football" como mejor jugador europeo de todos los tiempos, aunque ya antes había ganado en 1957 y 1959 el título de mejor jugador europeo del año.

Debutó en la Primera División argentina con el River con tan sólo 17 años, y jugó por primera vez con la selección de su país en 1947. En 1949 y a consecuencia de una huelga de futbolistas en Argentina fichó por el Millonarios de Bogotá, donde completó su aprendizaje.

En 1952 viene a España a jugar un triangular contra el Real Madrid y un equipo sueco para conmemorar las Bodas de Oro del equipo blanco. Y asombra a todo el público realizando jugadas que por aquí no se conocían, mezclando la velocidad europea con la sutileza sudamericana. Muy pronto el Real Madrid y el Barcelona se disputarán sus servicios, pero mientras el Barcelona negocia con el River, equipo al que todavía pertenecían los derechos del jugador (le pagó cuatro millones de pesetas), el Madrid se dirige directamente al Millonarios (desembolsando millon y medio de pesetas). Surgió entonces el conflicto. Interviene la FIFA, que exige que el jugador tuviera la baja de ambos clubes sudamericanos para poder jugar en España. La Delegación Nacional de Deportes, presidida por el General Moscardó, también terció imponiendo la solución: el futbolista debía alternar sus servicios: un año, en el Real Madrid, al siguiente en el Barcelona, y así sucesivamente. El Madrid accedió, pero no hizo lo mismo el equipo blaugrana, que herido en su orgullo renunció, siempre que el Madrid le pagase los cuatro millones que había adelantado. Y de esa manera los merengues consiguieron no solo al mejor jugador de su historia, sino que también habían puesto la primera piedra de la década dorada del equipo blanco. Así, el 22 de septiembre de 1953 firma su primer contrato por el Real Madrid, que ascendía a 600.000 ptas. al año más primas y sueldos.

Vivió once temporadas como jugador blanco, pues dejó el club el 30 de junio de 1964. En este tiempo consiguió una gran cantidad de títulos, tal como aparece reflejado en su palmarés, pero sobre todo dejó un sabor especial que hace que hoy en día algunos aficionados al fútbol puedan incluir en su "curriculum" una frase como la siguiente: "Yo he visto jugar a Di Stéfano".

Su paso por el Real Madrid está lleno de anécdotas. Como aquel marcaje que le hizo en la temporada 54-55 una defensa del Valencia llamado Mangriñán y por el que Di Stéfano no puedo tocar el balón, que ha quedado en los anales futbolísticos como un recuerdo de primera fila, o asuntos extradeportivos, como las películas que protagonizó: "La Saeta Rúbia", un film mediocre, pero de gran éxito económico o "La batalla del domingo", en la cuál era secuestrado, una situación que el destino quiso que de la ficción pasara a convertirse en realidad, pues el 24 de agosto de 1963, estando en su hotel en Caracas, donde había ido con el equipo a jugar un torneo fue raptado por el grupo revolucionário FALN. Por suerte, lo único que pretendían era adquirir notoriedad por la personalidad del secuestrado. Cuando lo consiguieron le pusieron en libertad sin hacerle ningún daño.

También la selección española tuvo el privilegio de contar con él. Tras nacionalizarse en 1956 jugó en España treinta y un partidos y consiguió 23 goles, aunque se le quedó clavada la espina de no poder jugar ninguna Copa del Mundo, ya sea por no haberse clasificado España (Mundial de Suecia) o por estar lesionado (Mundial de Chile).

Tras terminar su contrato con el Real Madrid todavía jugó dos años más en el Español de Barcelona retirándose definitivamente en 1966.

Aunque no tuvo tantos éxitos como jugador también fue un buen entrenador. Estuvo en el Elche, Rayo Vallecano, Castellon, Real Madrid, Valencia, River Plate y Boca Juniors, obteniendo títulos en estos tres últimos equipos. Así, por ejemplo, con el Valencia fue Campeón de la Recopa.

En la actualidad Alfredo Di Stéfano está ligado al club madridista como asesor del presidente y como representante blanco en numerosos actos internacionales.

A principios de 1.998 fue nombrado por la FIFA mejor jugador del mundo de todos los tiempos y ocupa un lugar destacado en el Salón de la Fama del recién creado museo esta institución.

En febrero de 2000 le fue concedida la Gran Cruz al Mérito Deportivo, la mayor condecoración que dentro del mundo del deporte se concede en nuestro país y en julio del mismo año es nombrado presidente de honor del Real Madrid por la Junta directiva presidida por Florentino Pérez. Está en posesión de la Gran Cruz de Isabel la Católica desde 1960 y de la Medalla de Oro al Mérito del Trabajo, así como de la Orden al Mérito en el grado de Gran Collar Extraordinario, máxima distinción que concede la Confederación Sudamericana de Fútbol.

Palmarés

Trofeos Nacionales: